Tango #11
"once cuadras después del final"
(extraído de algún sueño)
Esto, debería de estarlo escribiendo mañana. Debería de titularlo deberes y sentrame horas mirando la cama. Debería, debería, debería. ¡Cuánto no debo!, ¡cuánto no debería!. ¿Debería de preguntarlo?, ¿en vez de exclamarlo?.
No estoy para hacerme reclamos a mi misma. Es triste, eso es cierto, no hay jabón que quite tristezas, pero podría recomendar un buen jabón para lavar todo aquello lavable, y entonces todo estaría limpio.
Voy a tomarme un vaso al despertar y otro al dormir de agua bendita, para que me quite estas maldiciones y malesdeojo de encima.
Pibe del corazón has roto el fondo del bolsillo de la chaqueta, de entre todas las tristezas te escogí a vos.
Madame, Gil, las cosas no se cantan si no son cantadas con el corazón.
-un piano de fondo-.
Caer sobre música, o en hacedores de música, entre dedos que fabrican notas, que son fabricadas por el choque magnífico del entretejido universo.
Madame, Gil, ¡digan si no han amado como para comerse un calcetín sin pensarlo!.
No hay nada más triste que un tango, o sí, si lo hay, algo que se titule tango que no lo sea.
¡¡Tan-tan!!
(extraído de algún sueño)
Esto, debería de estarlo escribiendo mañana. Debería de titularlo deberes y sentrame horas mirando la cama. Debería, debería, debería. ¡Cuánto no debo!, ¡cuánto no debería!. ¿Debería de preguntarlo?, ¿en vez de exclamarlo?.
No estoy para hacerme reclamos a mi misma. Es triste, eso es cierto, no hay jabón que quite tristezas, pero podría recomendar un buen jabón para lavar todo aquello lavable, y entonces todo estaría limpio.
Voy a tomarme un vaso al despertar y otro al dormir de agua bendita, para que me quite estas maldiciones y malesdeojo de encima.
Pibe del corazón has roto el fondo del bolsillo de la chaqueta, de entre todas las tristezas te escogí a vos.
Madame, Gil, las cosas no se cantan si no son cantadas con el corazón.
-un piano de fondo-.
Caer sobre música, o en hacedores de música, entre dedos que fabrican notas, que son fabricadas por el choque magnífico del entretejido universo.
Madame, Gil, ¡digan si no han amado como para comerse un calcetín sin pensarlo!.
No hay nada más triste que un tango, o sí, si lo hay, algo que se titule tango que no lo sea.
¡¡Tan-tan!!
0 Comments:
Post a Comment
<< Home